COVID-19 una nueva oportunidad para la prevención del suicidio
La pandemia de COVID-19 en curso plantea amenazas claras para el bienestar mental, pero no es inevitable un aumento del suicidio si se toman las medidas apropiadas.
La pandemia de COVID-19 en curso plantea amenazas claras para el bienestar mental, pero no es inevitable un aumento del suicidio si se toman las medidas apropiadas.
El impacto emocional y psicológico de la pandemia puede llevar a sentir desesperación y tener pensamientos suicidas. Sepa las señales y qué puede hacer.
Durante esta pandemia de la enfermedad del coronavirus 2019 (COVID-19), la gente puede sentir ansiedad, temor, frustración, tristeza y soledad hasta el punto que los sentimientos se vuelven constantes y abrumadores.
La prevención del suicidio es una tarea que involucra la participación de diversos sectores del estado y de la comunidad, entendiendo que únicamente con respuestas globales se podrá abordar de forma efectiva este problema de salud pública.
Las tasas de suicidio en el mundo han trepado a cifras escandalosas, que ascienden ya a un suicidio cada 40 segundos, lo que implica que 800.000 personas se quiten la vida al año. Ello constituye un drama social y además, un