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Los antiagregantes plaquetarios inhibición el proceso de la coagulación y son analizados en "Hematología". No obstante, son utilizados frecuentemente como antitrombóticos en medicina interna y cardiología en el manejo de los sindromes coronarios y en las valvulopatías. Cuando se desarrolla en el vaso una homeostasia inapropiada e incontrolada, surge el trombo. A nivel arterial el alto flujo puede producir erosiones a nivel endotelial y subendotelial, principalmente en regiones de estrechamiento arterial y zonas de turbulencia. Las plaquetas se adhieren en estas zonas, ocupan la interfase, desencadenan los procedimientos de agregación y liberación y se favorece la coagulación periplaquetaria con activación de la trombina (que es también proagregante) y la formación de depósitos de fibrina, constituyendo el trombo, que puede obstruir la circulación distal y generar embolias. Con el objetivo de prevenir la trombosis coronaria, se utilizan antiagregantes plaquetarios, fundamentalmente el ácido acetilsalicílico, clopidogrel, prasugrel, ticagrelor, abciximab, tirofibán, iloprost y dipiridamol. Sus indicaciones principales son: profilaxis de accidente embólico en prótesis biológica en posición aórtica o mitral, fibrilación auricular en mayores de 75 años de bajo riesgo de embolia, angor estable, angioplastia coronaria, cirugía de revascularización cardíaca, profilaxis y tratamiento del Sindrome coronario agudo con o sin elevación del segmento ST. Nota: Los fármacos y productos comerciales del Grupo se describen en "Hematología".