Detalle Farmaco

La hipertensión arterial (HTA) se define como elevación sostenida de la presión arterial sistólica y/o diastólica de valor igual o mayor a 140/90 mm de mercurio en adultos mayores de 18 años, aunque se evaluan puntos de corte más bajos. La presión arterial (PA) sistémica es determinada por el gasto cardíaco y las resistencias vasculares periféricas. La HTA se caracteriza como un síndrome cardiovascular progresivo que determina cambios funcionales y estructurales del corazón y del sistema vascular. Constituye un factor de riesgo mayor de enfermedad aterosclerótica. Su causa se desconoce en la mayoría de los casos (HTA esencial), pudiendo ser secundaria a causa renal, endócrina, farmacológica o neurológica. El objetivo del tratamiento antihipertensivo es la reducción de la morbimortalidad cardiovascular mediante el descenso de la PA. Los fármacos antihipertensivos que han demostrado disminuir la morbimortalidad y por lo tanto son de primera línea se subdividen en: -antagonistas del receptor de angiotensina II (ARA II), -betabloqueantes, -calcioantagonistas, -diuréticos -inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA). Los antihipertensivos pueden ser indicados en monoterapia o combinados; con el objetivo de mejorar la adhesión al tratamiento. Los 5 grupos terapéuticos son eficaces y han sido de primera línea para el tratamiento de la HTA por décadas. Recientemente se ha desplazado el uso de betabloqueantes como antihipertensivos, reservándolos para la situación en que se asocia cardiopatía isquémica concomitante.